lunes, 14 de abril de 2008

López Aguilar


Rebuscando entre mis apuntes, acabo de encontrar un sobre marrón que contiene algo que creía perdido; las notas manuscritas que escribí siendo alumno de primero de Derecho en el primer ciclo de conferencias en el que me matriculé, allá por marzo de 1999. Mucho ha llovido desde entonces, se celebraban los veinte años de la Constitución y Gumersindo Trujillo, catedrático de derecho político ya fallecido, organizó aquellas jornadas.

Recuedo a López Aguilar con el labio apretado, escuchando a sus compañeros mientras le temblaba la pierna, ansioso por intervenir. De las anotaciones que tomé os apunto algunas frases que por su frescura me llaman la atención,"España es muchas Españas", y una frase que tengo subrayada, probablemente porque puso especial énfasis en ella; " la capacidad política es capacidad de gastar" se refería al proceso de transferencias y la creciente disponibilidad de recursos por las CCAA, especialmente refiriéndose a Canarias. Criticó duramente al gobierno canario de la época, por echar la culpa de sus errores a Madrid...

En el descanso aproveché para hacerle unas preguntas y charlar con él, me recibió con una sonrisa y hablamos un rato. Posteriormente tuve la oportunidad de ir a otros actos académicos en los que participó antes de que fuera designado parlamentario en el año 2000. La última vez que lo vi en persona fue justo después de la entrega de los premios canarias 2007, había ganado las elecciones autonómicas, en esa ocasión tuve la oportunidad de saludarle y desearle suerte.Parece que, hoy por hoy, va a presidir la comisión de exteriores del Congreso. Futuro ministro de exteriores? El tiempo lo dirá.

7 comentarios:

Baakanit dijo...

"la capacidad política es capacidad de gastar"

Yo creo que ese es el lema de todo político, aunque si se le agregan unas cuantas palabras más, se sabrá que esos gastos no son en el pueblo, sino para ellos mismos.

Saludos

Emilio dijo...

Bueno, esa frase la decía asociada a la idea de la responsabilidad en el gasto. En Canarias tenemos muchos frentes de corrupción política abiertos.
Desgraciadamente tienes razón, creo que hay muchos políticos que hacen suyo lo que es de todos.
Gracias por tu comentario.

Mirko dijo...

Siempre me gustó, y se la da tan bien soltar buenas frases como el dibujar.
"los canarios somos como Robinsones y Ulises. Buscamos salir de la isla constantemente y cuando lo hacemos no dejamos de soñar con volver alguna vez". Me parece una definición excelente.

Dita Ciccone dijo...

Mirko, eso también nos pasa a los gallegos, emigramos,nos esparcimos por el mundo... y siempre con morriña. De Canarias sólo conozco Tenerife, pero me parece un sitio ideal para vivir por el sitio en sí, y por la gente... si no lo hago, es por eso de si "me dará claustrofobia insular", mmm.
Emilio: No tengo ni idea de cómo funciona la política en Canarias, pero el tema de las transferencias de competencias... pffff, no sé yo, tiene que hacerse con tanto control... que no sé yo hasta que punto nos podemos fiar de la "responsabilidad en el gasto"...

Emilio dijo...

Muy bueno eso de la "claustrofobia insular", has conceptualizado lo que más de uno siente cuando viene a vivir aquí,jaja!

Es cierto que vivimos, de hecho, en un Estado federal, ampliamente descentralizado. En mi opinión,el debate sobre centralización o descentralización es humo, como todo lo que tiene que ver con la organización. Dentro de 50 años tal vez volvamos a un sistema centralista y seguirán incumpliéndose los plazos para obtener una licencia urbanística.

No me quiero extender demasiado, la verdad que es un tema del que podría escribir durante horas!

Gracias por tus comentarios!

linares dijo...

Recuerdo ese ciclo de conferencias sobre la reforma de la Constitución. Recuerdo que escuché cosas que he tardado años en "aprehender" (como diría Espinilla). Recuerdo que las ofertas de un restaurante imitación del McDonals, situado en el Alcampo cercano a la Facultad, nos causaban unas digestiones muy pesadas(En mi caso, totalmente incompatibles con la actividad cerebral necesaria para tan sesudas argumentaciones). Incluso recuerdo que uno de los conferenciantes invitados riñó cariñosamente a Gumersindo por formularle "una batería de preguntas demasiado complicada para aquellas horas de la tarde" (las 16:00 h). Seguramente, ellos también sufrían los efectos de un laborioso (aunque algo más caro) proceso digestivo.

Gumersindo Trujillo era un catedrático de pata negra (de los del Real Decreto 144/2003). No era uno de esos rancios y grises académicos que hoy abundan en las Universidades. Con la actual "tropa" (me hace mucha gracia que Hegel se refiriera de este modo a los intelectuales de su época; "la tropa"), la Universidad ha perdido su papel de centro de debate y generación de ideas. Parece que tendremos que hacernos socios de algún "thinktank" (suena tan moderno... y organizan unos piscolabis fantásticos...)

Emilio dijo...

jajaja! me acuerdo que íbamos a ese "restaurante" porque presentando la entrada del cine te hacían una oferta 2*1 del menú!

Muy bueno lo del "think tank". El otro día se lo escuché a Zapatero y me entró la risa. Que manía por anglofilizarlo todo, ya no hay "Institutos" ahora tenemos una fabulosa ley de Agencias estatales..